
Gobernador agradece ayuda de los héroes anónimos
Diferentes han sido las cooperaciones que ha recibido la provincia, una muy en particular es la que está desarrollando Álvaro Espinoza en El Salado.
Así como empresas y particulares han llegado con una importante ayuda a los cientos de damnificados a la región, también existen otras cooperaciones que son dignas de destacar como la que realiza Álvaro Espinoza en el Salado.
“Vengo desde Caldera y estoy trabajando desde el día 28 de marzo, subiendo con apoyo técnico, psicólogos, nutricionistas y hemos tratado de dar un enfoque para que los niños vuelvan a su rutina normal”, señaló Espinoza, quien además aclaró que no pertenece a una agrupación formal y que esta ayuda surgió por el interés y las ganas de aportar.
La metodología consiste en realizar talleres educativos y formativos que van desde artes visuales, destrezas físicas y dinámicas educacionales, esto con la finalidad de ser una iniciativa de recreación y de distracción para ellos que están viviendo en un entorno radicalmente distinto al que vivían antes de la catástrofe.
Y han sido los propios padres, que si bien en un principio reaccionaron con desconfianza, en la medida que iban pasando los días y las actividades que iba desarrollando Espinoza, fueron ellos mismos los que encargaron de brindar las condiciones necesarias para seguir con el trabajo. “Cada vez los padres están más comprometidos, vemos a más niños cada mañana, y eso me pone muy contento”.
Para el gobernador Yerko Guerra son este tipo de iniciativas las que ayudan, no tan solo las que son en materiales y enseres propiamente tal, sino que también la que se entrega desde el punto de vista vocacional. “Este es el llamado que hace la Presidenta y también el Intendente, todos tenemos que sumar y aportar para la recuperación de nuestra provincia, de forma positiva y constructiva”.
Para la autoridad, hay varias iniciativas que se realizan de forma positiva y que quizás los medios de comunicación no toman mucho en cuenta, pero que son dignas de contarlas y también de agradecer por ser de forma anónima y sin esperar una retribución a cambio.